El tren viajero
Se acercaba la tarde del día deseado
y entre sueños y risas se iba imaginando
un mundo de colores que lo fue dibujando
con traje de fantasía lo vivía soñando.
En la estación del tren tanto días esperando
el viajero ausente del ayer anhelado
los momentos vividos que los fue recreando
en gotitas de tiempo que le va alimentando.
Ese tren viajero del destino, sin fecha, ni ruta
que una tarde trajera en sus vagón la vida
en asientos de primera clase o tal de turista
el momento que aporta la esperanza dormida.
El crujir de las vías los carteles anuncian su llegada
las horas de espera en la estación, tan vaciá y fría
el tiempo que aguarda su ilusión más deseada
para caminar el sendero juntos cada nuevo día.
Francis Falcón
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